Pues empecemos por definir que es el Abandonware y luego podremos entrar en mas detalle en las razones de porque está en peligro.
El término Abandonware surge de la unión de los términos “Abandon” y “Ware”. Haciendo referencia a un software, ya sean programas o videojuegos, que se encuentra de una forma u otra abandonado por la compañía que lo creó o distribuyo. Aunque el término es un poco ambiguo. Ya que se puede considerar que si el software no recibe actualizaciones o mantenimiento se encuentra también en este estado. Sin embargo, el principal motivo por el cual podemos considerar un videojuego como Abandonware es que ya no se comercializa activamente por la compañía creadora o distribuidora.
¿Bueno pues entonces parece que está mas o menos claro, no? Pues realmente no. Porque este término de Abandonware, no es un término legal. Es más, muchas de las obras que se distribuyen bajo este paraguas, legalmente siguen estando a nombre de las compañías aunque por diversos motivos no consideren necesario ejercer ningún tipo de acción legal.
¿Por qué surgió el Abandonware?
El movimiento relacionado con el término en cuestión nace de la premisa de preservación del software. Ya que normalmente las propias compañías poseedoras de los derechos no mantenían ninguna política al respecto. Esto ha cambiado poco a poco con el tiempo. Ya sea dependiendo del tamaño de la empresa, de los réditos que aún pueda conseguir con estos juegos y por su puesto del capital que puedan dedicar a este propósito. Una de las que más claro tiene que necesita preservar su legado por ejemplo es Nintendo. Aunque también es verdad que con un interés legítimo ya que sus juegos de antiguas plataforma todavía siguen siendo comercializados de alguna u otro forma.
Pero bueno, volvamos al tema del surgimiento del movimiento. Con el nacimiento de numerosos emuladores allá por los años 90 se produjo la aparición de numerosas webs que no solo ofrecían los emuladores en si mismos, sino también los juegos que podían correr en ellos.
Poco a poco ningún sistema quedó sin su emulador respectivo. De repente podíamos jugar desde nuestro PC a antiguas consolas, ordenadores de 8bits de 16bits, arcades, etc…
Por poner algunos ejemplos. El proyecto MAME para emular arcades hizo su aparición haya por el año 1997. Y el emulador de Super Nintendo ZSNES dió su primera zambullida en el 1995.
Ante todas estás posibilidades de jugar a estos juegos desde emuladores, la comunidad fue creando métodos para poder volcar los juegos de esas plataformas de una u otra manera. Lo que hacía que el catálogo fuera cada vez más grande.
En esta época, páginas desaparecidas como Emulatronia dentro del panorama Español, ofrecían un punto de encuentro para estar al día de todos los avances en emuladores y nuevos videojuegos que se incorporaban al creciente catálogo.
Durante unos años Internet siguió libre. Y cada vez se recopilaban más y más juegos poniéndolos a disposición de una nueva comunidad de personas que vieron en la emulación una forma de revivir esos sistemas olvidados y disfrutar de nuevo de ellos.
Sin embargo en el año 1999 todo eso terminó. Nintendo comenzó una campaña de acoso y derribo a toda web que almacenara y pusiera a disposición del público cualquiera de sus juegos. Aunque eran juegos que no podían vender para sus sistemas obsoletos, vieron gracias a la emulación, la cantidad de posibles compradores que aún demandaban jugar a ellos. Estaba claro, Nintendo no quería dejar que todo ese patrimonio, legalmente en su poder, fuera de libre distribución. Así que como comento, fue a por todas y los juicios y acuerdos comenzaron a sucederse rápidamente. Dando como resultado la desaparición de casi todos sus videojuegos del panorama de la emulación.
Evidentemente, esto tenía un claro objetivo. Poder volver a revender esos juegos en sus nuevas plataformas como recopilatorios clásicos. Y evidentemente estaban en su derecho.
Sin embargo, la ironía del asunto, es que fue la propia emulación y esta recopilación de videojuegos por parte de la comunidad, la que hizo que las empresas se dieran cuenta de una cosa. Y es que estos activos aún seguían teniendo valor y merecían la pena, no solo preservarlos sino poder darles una segunda vida comercial.
Evidentemente no penséis que solo fue Nintendo la que comenzó esta guerra contra las páginas de ROMS. Otras muchas como Sony, Sega, Atari, Capcom, Konami, etc.. siguieron sus pasos.
Destacar que en el año 2018 la demanda de Nintendo sobre dos grandes páginas de ROMS como LoveROMS y LoveRETRO finalizó con el pago de una multa por valor de 12 millones de dólares que terminó con el cierre de ambas webs.
¿Y actualmente siguen las compañías protegiendo sus videojuegos antiguos?
Pues si, efectivamente todas las grandes compañías se han dado cuenta del gran valor que tienen sus antiguas creaciones y las protegen con demandas en cuanto detectan algún tipo de infracción.
Es más, todas ellas han creado o mejorado sus métodos para detectar y controlar la distribución de ROMS de una manera cada vez más eficiente. En algunos casos hasta han atacado directamente a los propios emuladores. Como en el caso de Nintendo sobre emuladores de sus máquinas sobre la plataforma IPhone.
¿Pero entonces el Abandonware y la emulación estarán muertos?
Después de todo lo anterior podríais pensar que esto hace inviable que esto continúe. Sin embargo, no todo se resume en las 4 grandes como Nintendo, Sony, Sega, etc…
Existen muchísimos juegos desarrollados y distribuidos por compañías que ya no existen como tales, o que no tienen ningún interés en redistribuir sus juegos. O que hace tiempo que vendieron sus licencias de explotación a algún conglomerado de inversores que tienen todo aparcado en un cajón.
Es por ello por lo que el Abandonware sigue existiendo, y si bien inicialmente el motivo principal era el disfrute de dichos juegos, poco a poco ha ido girando a algo más.
Cada vez se hace más hincapié en la preservación de las obras informáticas como en cualquier otro tipo de arte como podrían ser la pintura o la literatura. Algunos gobiernos están impulsando de hecho el intentar almacenar cualquier obra informática que se publique. En España por ejemplo el gobierno obliga a mandar una copia de cualquier videojuego físico que se comercialice en sus fronteras para su almacenamiento. Esta ley se denomina la Ley de Depósito Legal.
Dicha ley establece que cualquier obra audiovisual, incluido el software de entretenimiento (como los videojuegos), debe tener una copia archivada en una biblioteca pública para fines de preservación cultural. Esta ley teóricamente aplica a videojuegos tanto físicos como digitales, siempre y cuando sean distribuidos oficialmente en España. Pero realmente en el tema de los videojuegos digitales, la cosa está en pañales, pero bueno, algo es algo.
¿Y por qué está nuevamente en peligro el Abandonware?
Pues después de todo lo que hemos argumentado, el lector podría pensar que bueno, quitando entonces las grandes compañías que siguen en activo, aún seguiríamos pudiendo disfrutar de un catálogo inmenso de videojuegos disponibles para su disfrute de compañías que no ejercen control sobre dichas obras o han desaparecido.
Pues la cosa pinta mal. Desde hace unos años, GOG (Good Old Games) plataforma de distribución digital de videojuegos que se especializa en ofrecer títulos clásicos y modernos sin DRM (Digital Rights Management, o gestión de derechos digitales) está cambiando las reglas del juego. GOG tenía originariamente como misión la de facilitar el acceso a dichos videojuegos clásicos difíciles de encontrar o de ejecutar en sistemas modernos. Sin embargo la está liando.
Si bien el concepto en principio parecer tener buena intención. Realmente lo que ha producido es una acaparación por parte de la empresa de todos los títulos que han podido negociar para adquirir sus derechos. Y como digo, la idea por parte de GOG partía de la base de adecuar dichos videojuegos para que pudieran ser ejecutados en plataformas modernas sin la necesidad de instalar nada adicional.
Aunque realmente muchas veces hacen trampa, porque tan solo usan emuladores de libre distribución por debajo, para hacerlos funcionar, pero bueno.
El caso es que cuando ya comienzan a comercializar cualquier software del que hayan adquirido su licencia, entra en marcha la retirada de todos esos videojuegos de cualquier sitio de Abandonware que lo distribuya. Evidentemente dichos sitios, conocedores de las multas a las que se pueden enfrentar, no les queda otra que retirarlos de sus páginas web y redirigir la ficha de tal o cual videojuego a la página de GOG para realizar la compra.
A ver, que todo esto es legalmente legítimo, pero poco a poco veo como GOG se está haciendo con las grandes joyas del pasado.
¿Y entonces que podemos hacer para disfrutar de videojuegos descatalogados?
Pues aquí ya cada uno es libre de hacer lo que quiera. O pasas por caja si el videojuego que buscas lo ha adquirido GOG. O te buscas la vida si algún valiente todavía lo tiene en su página para descargar. Los usuarios normalmente no suelen percibir ninguna imputación por estos hechos. Pero ojo, que Nintendo si llevó a cabo acciones legales contra usuarios por descargar juegos de su propiedad.
De hecho todo este artículo a partido de la creación de una nueva sección en lacavernainformática.com en donde poder compartir mis juegos de MS-DOS que en mi opinión considero que merecen más la pena. Pero no solo me he limitado a hacer un listado. Sino que he habilitado mediante el uso js-dos el que podáis disfrutar de ellos directamente desde el navegador sin necesidad de instalar ni descargar nada.
¿Qué ha pasado cuando he empezado a hacer el listado de esos juegos favoritos de mi infancia? Pues que en muchos de los mejores títulos me he encontrado con nuestros amigos de GOG. Y fruto de ese estallido de furia os encontráis leyendo este artículo.
Pero bueno, es lo que hay. Esperemos que el día que GOG quiebre no borren todos sus activos digitales y se pierdan como lágrimas en la lluvia, guiño, guiño.
Y lo dicho, pásate por la nueva sección. Iré añadiendo poco a poco más videojuegos que merezcan la pena. La idea es que, aunque hay páginas que ofrecen cantidades de juegos increíbles, cada vez más tenemos tantas opciones que muchas veces acabamos desbordados sin saber que elegir.
Por eso para el que quiera de una forma rápida, asegurarse de jugar a buenos juegos considero que puede ser una buena opción.
Pues nada espero que os haya gustado el artículo. Y que sepáis que todos los juegos que aquí se publican por ahora son legítimamente Abandonware hasta que no llamen a mi puerta, jajaja.